私の気持ち (Mis sentimientos)

Bien, hoy traje un OneShot AriYama :), siento que me salio muy largo xD bueno hoy edite una foto, no esta muy bien ya que no se editar muy bien xD me salio mas o menos e.e bueno ya menos platica aqui esta, espero y comenten, asi me animare a escribir mas :).

Titulo:私の気持ち(Mis sentimientos)

Genero:Yaoi/Shonen ai

Extension:OneShot

Autora:PaoChii

Pareja:AriYama

Nota:Aqui Daiki y Yamada tienen la misma edad, pero aun asi Daiki es el mayor asi como por meses xD y Yamada el menor

Esta dedicado a Haruhi Yamashita por ser mi primera seguidora y porque le gusta el AriYama :)

私の気持ち(Mis sentimentos)

Estaba en su cama, sin intenciones de moverse, había sido un día muy agotador y para colmo, había visto algo que en definitiva nunca espero ver, estaba muy triste, esa imagen nunca se iba a borrar de su mente.

~•~•FB•~•~<---(Flash back)

Estaba en su clase de historia, faltaba poco para salir y estaba muy feliz, le había pedido al chico que le gustaba, el cual correspondía al nombre de Yuto, que si podían ir al cine, por fin se había decidido a declararse al menor, pero él le había dicho que ese día no ya que tenía algo que hacer y antes de poder deprimirse, lo detuvo diciendo que si que tal al siguiente día, a lo cual asintió sonriendo eufóricamente y así estuvo el resto del día con una gran sonrisa en el rostro.

-Porque esa sonrisa-le susurro su amigo Daiki sacándolo de sus pensamientos

-A la salida te digo-susurro de vuelta para que el profesor no los oyera, lo bueno era que se sentaban uno al lado del otro así que no había mucho problema

Al sonar el timbre Yamada se paró de un brinco y empezó a guardar sus cosas rápidamente.

-Wow, hoy estas muy animado, vas a algún lado-le dijo su amigo viéndolo con una sonrisa burlona

-Pues no, de hecho no, simplemente estoy feliz-dijo con una sonrisa y un ligero sonrojo en sus mejillas

-Se porque esa mirada, es por Yuto cierto-dijo Daiki con una sonrisa picara dándole un ligero codazo en las costillas

-S-si-susurro el menor aún más sonrojado pero conservando su sonrisa

-¿Paso algo bueno?-dijo Daiki cogiendo su mochila y dirigiéndose a la salida

-Bueno... Si, paso algo bueno, mañana iré al cine con él y ya me decidí, le diré lo que siento-dijo el menor siguiendo a Daiki

-Wow, pues buena suerte-dijo Daiki volteando la mirada

-¿Pasa algo Dai-chan?-pregunto acercando su rostro al del mayor

-No, no pasa nada-dijo Daiki otra vez volteando la mirada, no quería que el menor viera el sonrojo que había provocado su acercamiento

-Mmm... Ok, ¿Quieres ir a algún lado, Dai-chan?, no me quiero ir a casa aún-

-¿Qué tal a la heladería y a la tienda de mangas?, hay uno que he querido comprar desde la semana pasada-dijo Daiki con un brillo especial en los ojos, algo que Yamada no supo descifrar

-Bien, yo también quiero compr-pero antes de terminar ambos se quedaron estáticos al ver la imagen que tenían en frente, estaban Yuto y un niño más pequeño que él, de cabello negro besándose, besándose en la entrada de la escuela, cuando se separaron, Yuto tomo la mano de su acompañante y se alejaron

-Amm, Yama-chan, yo...-antes de poder decir algo más, Yamada empezó a correr mientras unas lágrimas furiosas caían de sus ojos

Fin ~•~•FB•~•~

Después de lo que paso Daiki estuvo intentando contactar a Yamada, esta era la quinta vez que le llamaba y lo mandaba al buzón, ahora si estaba muy preocupado, había querido seguirlo pero sabía lo terco que era, no lo querría escuchar y se enojaría con el aunque no tuviera la culpa, así era cuando se ponía triste.

-Contesta, contesta-susurraba desesperado, mientras intentaba llamarlo otra vez y se enojó al escuchar el buzón de voz

-¿Qué hago, que hago?..., ya se, iré a su casa y si no está lo buscare hasta que lo encuentre-así, decidido en su plan, salió corriendo de su casa

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Seguía llorando, las lágrimas no se detenían, estaba sintiendo el dolor más grande que jamás había sentido y se sentía la persona más miserable del mundo.

Escucho como de pronto tocaban el timbre, no le importó en absoluto, sabía que si lo seguía ignorando pronto se cansaría y se iría, así, con eso en mente, volteo su cuerpo y se tapó los odios con la almohada mientras nuevas lágrimas volvían a surcar sus mejillas.

En cuanto Daiki llego a la casa del menor, empezó a tocar el timbre pero, nada, todo estaba muy silencioso, cansado de tocar se sentó recargándose en la puerta pensando en los lugares que le gustaban al menor, tal vez estaría en uno de ellos, de pronto sintió que la puerta se abría.

-Dejaste la puerta abierta-susurro entrando, cerrando la puerta tras de sí, como todo estaba tan silencioso decidió subir a la habitación del menor, ya sabía dónde estaba así que estaba bien, en cuanto llego vio un bulto en la cama, así que caminando lentamente, se acercó y dijo

-¿Yama-chan?-al oír esa voz se levantó de un brinco exclamando

-¿Dai-chan, que haces aquí?, ¿Cómo entraste?-

-Dejaste la puerta abierta y estoy aquí porque estoy preocupado por ti-dijo Daiki acercándose al menor dándole un tierno abrazo

-Lo siento, simplemente no tenía ganas de contestar el teléfono-dijo Yamada escondiendo su rostro en el pecho del mayor

-Descuida, ya estoy aquí, todo va estar bien, ne~-dijo Daiki separando a Yamada un poco de su cuerpo, de pronto Daiki sintió la necesidad de probar sus labios así que sin pensar bien lo que hacía acerco su rostro al del menor y lo beso

Yamada estaba en shock, Daiki, su mejor amigo, lo estaba besando ¿Por qué?, ni siquiera lo separo pero tampoco correspondió al beso, estaba muy confundido por lo que estaba sucediendo, así Daiki se alejó bruscamente de Yamada mientras decía

-Lo siento-así, sin más Daiki corrió fuera de la casa de Yamada preguntándose como miraría al menor ahora

Yamada aún seguía en shock, por que el mayor lo había besado, no tenía sentido, el nunca había estado interesado en Daiki de esa manera, ¿Tal vez él le gustaba?, bueno una vez él le había dicho que le gustaba alguien pero no se lo podía decir, había dejado de insistir ya que estaba lo suficientemente preocupado de sus asuntos con Yuto que no le había tomado importancia a los sentimientos del mayor, estaba dispuesto a llamarle pero después pensó que la manera más correcta de preguntarle por que había hecho eso era en persona así que le preguntaría en el colegio.

Al siguiente día lo primero que hizo Yamada fue fijarse en el asiento de Daiki, aunque sabía que el mayor siempre llegaba tarde, mejor decidió sentarse y esperar, la sorpresa fue que pasaban las horas y no llegaba, le pregunto al presidente de la clase que por que no había venido y el solo dijo que estaba enfermo, eso lo preocupo demasiado, tanto que a la salida olvidó por completo su cita con Yuto.

-"No iré a su casa, esperare pacientemente hasta mañana"-se auto animo Yamada, completamente decidido.

Pero no se esperaba que esa semana sería muy triste para ambos, primero llegó a la escuela muy ansioso por hablar con Daiki y preguntarle qué significaba ese beso, para su suerte, el mayor había llegado temprano y ya se encontraba en su lugar viendo por la ventana, nervioso se acerco a tratar de entablar conversación.

-Oh, Dai-chan buenos días-dijo con una sonrisa, tratando de esconder sus nervios, Daiki se volteó y le dijo con una sonrisa débil

-Buenos días-

-¿Ya te sientes mejor?-preguntó Yamada viendo que el mayor volvía a fijar su vista en la ventana

-Si-respondió Daiki cortante, sin mirarlo, Yamada estaba por añadir algo más pero el timbre sonó y se vio obligado a sentarse aunque de vez en cuando su vista se concentraba en el mayor, que hacía de todo por tratar de ignorarlo y esto a Yamada de cierta forma le dolía

Cuando sonó el timbre del recreo Yamada le quería pedir a Daiki comer juntos para hablar con él, pero en cuanto el timbre sonó, el mayor salió corriendo rápidamente, Yamada supuso que iría a la cafetería, así que también salió corriendo en dirección a la cafetería, pero al llegar ahí se dio cuenta que no estaba el mayor, trato de buscarlo en otros lugares de la escuela pero no lo encontró así que resignado se fue al salón y se puso a comer, cuando estaba por sonar el timbre, Daiki entró, se sentó y volvió a mirar por la ventana ignorando otra vez a Yamada, que estaba por hablarle cuando sonó el timbre y resignado trato de concentrarse en sus clases.

A la salida fue lo mismo, en cuanto el timbre sonó Daiki se levantó de un brinco, guardó sus cosas muy rápido y se fue corriendo, Yamada trató de seguirlo, pero al llegar a la puerta de la entrada ya no estaba y se fue a su casa.

Así fue toda la semana cada vez que Yamada trataba de hablar con Daiki, el simplemente se escapaba o lo ignoraba y eso le dolía, ellos siempre habían sido mejores amigos, la verdad es que a pesar de lo del beso no quería perder a Daiki, lo quería y mucho, así que decidió que al siguiente día iría a su casa y arreglaría de una vez por todas las cosas con el mayor.

Yamada iba saliendo tranquilamente hacia su casa, esta vez no iba a perseguir al mayor, cuando de pronto choco con alguien que lo tiro al suelo.

-Perdón ¿Estás bien?-pregunto el chico ayudando a Yamada a levantarse, quien se dio cuenta de quién era y exclamo

-¡Yuto!, si estoy bien, gracias-

-¡Wow Yama-chan!, déjame decirte que la otra vez te estuve esperando en la salida y te fuiste corriendo sin dirigirme la palabra-dijo Yuto algo molesto

-¡El cine, lo olvidé por completo!- exclamo sorprendido

-Ya veo, pero más importante, ¿Estas peleado con Daiki?-dijo Yuto serio

-¿P-porque?-pronuncio difícilmente

-Bueno el otro día te vi solo comprando en la cafetería, cuando normalmente, lo haces con Daiki y también lo he visto irse a casa corriendo sin ti-dijo en tono preocupado

-Bueno algo así, Yuto, tu sabes quién es la persona que le gusta a Daiki-dijo Yamada de pronto recordando que antes los tres eran buenos amigos

-Eso te lo tiene que decir el no yo-dijo Yuto sorprendido y algo incómodo

-¿P-por favor?-susurro Yamada débilmente

-Mira, eres tú, ¿Ok?, no sé ni para que te lo digo, pero bueno ten esto en mente, Daiki te quiere más de lo que piensas el siempre te está cuidando y preocupándose por ti-dijo Yuto dándole una palmada alejándose de ahí

-¿Y-yo-susurro Yamada nervioso, de pronto sintió que su cara se ponía roja, así que caminando a la salida se puso a pensar que era lo que le gustaba de Daiki, primero el fue su primer amigo en la escuela, siempre lo apoyaba y le regalaba una sonrisa cuando estaba enojado o triste, claro que su sonrisa le gustaba, era una sonrisa hermosa y para qué negarlo, era muy guapo también.

Al pensar todo eso se dio cuenta de que estaba más rojo que los tomates que tanto odiaba así que se apresuro a llegar a casa, pero aún así seguía pensando en las cosas que le gustaban de Daiki

A la mañana siguiente Daiki se levantó inesperadamente temprano y eso que no había escuela ese día, bajo pero encontró una nota que decía que sus papás y hermana habían salido así que se puso a hacer el desayuno y luego a mirar la televisión, estaba triste, era el primer sábado que pasaba sin Yamada, de pronto escucho como tocaban la puerta así que sin muchos ánimos se levanto y fue a abrir, se sorprendió bastante al ver al menor ahí sonrojado, pero viéndolo directamente a los ojos.

-¿Puedo pasar?-pregunto el menor viendo a Daiki fijamente

-S-si, pasa-así se hizo a un lado para dejar pasar al menor, en cuanto hubo cerrado la puerta se dio cuenta que Yamada estaba completamente nervioso y evitaba la mirada del mayor

-Dai-chan tengo que decirte algo, así que escucha con atención-

-D-dime-dijo el mayor nervioso, Yamada inclino su cuerpo y exclamo

-¡Lo siento!-

-¿Lo sientes?-pregunto el mayor sorprendido

-Siento, no haberme dado cuenta de tus sentimientos antes, pero lo que más siento es no haberme dado cuenta de mis sentimientos por ti, lo estuve pensando muy bien y hay tantas cosas que me gustan de ti, pero lo que más me gusta de ti, e-eres t-tu-dijo esto ultimo tartamudeando con el rostro completamente rojo

-¿Y-yo te gusto?-pregunto Daiki confundido y nervioso

-S-si, así que por favor no te alejes de mí, yo, yo, no soportaría perderte-dijo fijando sus ojos en Daiki, quien se sorprendió por esto, mientras la felicidad se expandía por su cuerpo, de pronto el mayor se acerco a Yamada y lo abrazo fuertemente

-¿Por qué te disculpas?, yo soy el que debería disculparse por ser tan necio y nunca decirte mis sentimientos y también por ignorarte toda la semana, lo siento-susurro esto último en su oreja, Yamada se sonrojo y dijo

-Yo también fui necio así que también tengo la culpa, pero ya no importa, porque te quiero Dai-chan-

-Yo también te quiero, Ryosuke-Daiki tomo a Yamada por la cintura y beso suavemente sus labios, el menor se sentía completamente feliz, por fin se había dado cuenta de sus verdaderos sentimientos y no iba a dejar que el mayor se alejara de él.

~•~•FIN•~•~